TITAN

TITAN

Hace casi un siglo, en la Barcelona de 1917, nacía TITAN en un pequeño laboratorio de la calle del Pi. Investigación y producción, todo se realizaba entre aquellas cuatro paredes que pronto se hicieron pequeñas, lo que les llevó a trasladarse al corazón industrial de la ciudad: Poblenou. Joaquim Folch i Girona, considerado una autoridad mundial en la minería del plomo, sería la persona que marcaría el rumbo de Industrias TITAN y haría que su nombre fuera sinónimo de calidad y servicio, apostando por la investigación y la innovación tecnológica. Con él, se elaboraron nuevos productos y se mejoraron los ya existentes, pero el mayor avance llegaría con la creación en 1934 del primer esmalte sintético de fabricación completamente nacional: TITANLUX. Su calidad era tan extraordinaria y superior a la de sus homólogos que la palabra TITANLUX se utilizaría para designar cualquier pintura. Aquella filosofía de investigación e innovación fue lo que hizo que TITAN saliera reforzada de la Guerra Civil y la Segunda Guerra Mundial. De aquella época oscura nacería algo único: los Colores al Óleo de TITAN. Su fama llegó a ser tal, que los pintores parisinos intercambiaban dos tubos del mejor óleo francés por uno de TITAN. 1955 fue otro año histórico para Industrias TITAN. La puesta en marcha de una nueva y moderna fábrica la convertiría en la única empresa del sector capaz de asumir la totalidad del proceso de fabricación de pinturas. Y pocos años más tarde, ya se alzaría como líder indiscutible del mercado español, llegando a todos los ámbitos de la vida: desde las casas particulares, haciendo de la pintura "el bricolaje más fácil", hasta la alta cultura, dando color a la intervención que el gran pintor Joan Miró realizó en la fachada del Colegio de Arquitectos de Cataluña. Su imparable crecimiento hizo necesario un cambio de ubicación, trasladándose a El Prat de Llobregat, a muy pocos kilómetros de Barcelona, donde hoy sigue su sede. Allí empezó una nueva etapa focalizada en el crecimiento y desarrollo de su capacidad productiva. Y allí nacieron también algunos de sus productos más importantes, como el práctico TITAN UNACAPA o el multisuperficies TITAN UNILAK. TITAN acababa el siglo XX con la puesta en marcha de la fábrica más moderna de Europa de pinturas plásticas al agua y entraba en el siglo XXI ofreciendo el abanico de productos más amplio y de mayor calidad del mercado.